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Daniela Catrileo




[San Bernardo 1987]  

Estudiante de filosofía y educación en Umce. Desde el año 2007 trabaja como gestora cultural en diferentes disciplinas, tanto en organización como producción independiente, destacando los ciclos de poesía y música en bar chancho seis. Durante el año 2008 es parte creativa del colectivo Florerito quebrado, sincronía poética, integrando a otros jóvenes de la capital y organizando diversas lecturas por Santiago.
Ha participado en diferentes encuentros de poesía dentro y fuera de Chile. Su trabajo se encuentra publicado en diferentes medios, tanto en revistas como fanzines, entre ellos destacan “Cada Vigilia” (2007) “Poemario Indestructible: Antología poética de Florerito quebrado” (2010), “Cajita de coser”  (2010), “Sácatelo de la cabeza”: Antología de cuatro generaciones (2010) y “Am o el canto de los pájaros” (2011).
Actualmente participa del proyectotiza, instalaciones de arte por Santiago, es becaria de la fundación Neruda 2011 y trabaja en la publicación de su libro “Río Herido”.




Mi corazón roto ha venido,
me habla y dice que
no le ha quedado nada,
que él está vacío
me dice que todo
se ha marchitado y yo
no tengo más que un río.

Juana Molina

de río herido


Todo río contiene un corazón de engaños

Tengo dos pájaros en la cabeza, que me sacuden para verlos y enérgicamente decidir el cauce de río. En sesenta minutos se puede escribir lo que te queda de vida, arrastrar esa pierna hambrienta hasta el horizonte, nombrar los nietos por orden alfabético, construir una realidad que pronto te abandona.




de Invertebrada

Hacer un collage con los días que no recuerdo para  no pensar que se perdieron o yo no estuve.


Tejer mis avenidas

Debería coleccionar cabellos
para tejer una bufanda
que llegue a las calles de Vicuña Mackenna,
y de esta manera
asegurar la ruta para encontrarme.




Ropa sucia

Viajo dos horas cada semana
para lavar mi ropa
y tenderla bajo los blocks
en Martín de Solís.

Sobre las escaleras del metro pienso:
si hay algo que olvidar
se irá en cada segundo que mi reloj
vuelve una hora atrás.



Morder otra boca

Podría quebrar mis extremidades y seguiría sin sentir nada, muerdo constantemente mis brazos, llevo las cicatrices a la vista de todos.



Dirección San Francisco

Hay un niño dirigiendo su pistola en mi cabeza, el santo de las calles sólo es el nombre. Amanecer como en la infancia, escuchando las mismas palabras. Ahora me paseo por la ciudad de los perros y las luces, mirando mi cuerpo entre vidrieras, tratando de recoger ese mundo que se rompe a la salida del sol. Un hombre repite su nombre para ver mi reacción.
Preferiría no pensar que perdí un hermano, porque no tengo más hermanos. Estaría contándole todas las estrellas si es que existe.



Postal

Es necesario hablar en dos voces
y componer nuestra historia no lineal.

Podría ser cualquier lugar.




Territorio manuscrito

Te escribí tanto tiempo
que ahora no me quedan
cuerpos que nombrar.



Esto no es un corazón

Un brazo sacude la imagen
y desaparecemos,
voy a subir tus cerros
y apagaré las luces.





Posteado por Angela Barraza Risso el 7:18. etiquetado en: , , , . puedes segui el rss RSS 2.0. déjanos tu comentario

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