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Gustavo Barrera









Gustavo Barrera Calderón (Santiago, 1975) es poeta y narrador, licenciado en arquitectura por la Universidad Católica de Chile. Formó parte del taller de la Fundación Pablo Neruda en 1996. Ha participado en diversas manifestaciones públicas e intervenciones urbanas que integran música, poesía y puesta en escena. Exquisite es el título de su primer libro de poesía, publicado en 2001 por Ediciones del Temple. Obtuvo la beca de creación literaria para escritores noveles, otorgada por el Fondo Nacional del Libro y la Lectura en 2002. En noviembre de 2002 el sello El Mercurio-Aguilar publicó Adornos en el espacio vacío, obra que recibió el Premio Revista de Libros 2002, del diario El Mercurio. En 2007 publicó la serie poética titulada Carácter, integrada por los libros Primer orificio, Papeles murales y tapices, y Mori Mari monogatari, en edición limitada bajo el sello Barrera Real, donde también editó el registro fotográfico de Dinero, muerte y un rostro sin cejas, intervención poética realizada en 2006. Creatur es su sexto libro de poesía, escrito con el apoyo de la beca de creación literaria para escritores profesionales del Fondo del Libro 2006, y editado en 2009 por RIL, y su más reciente libro, Cuerpo perforado es una casa, fue publicado en 2011 por La Calabaza del Diablo.


El espacio vacío




Todos los ingredientes se mezclarán esta noche

(la casa proyecta sus pasillos hacia los cuatro puntos cardinales)

los invitados visten adecuadamente


Todo indica que en ese lugar ocurrirá algo

algunos rastros indican que ya han sucedido cosas
en ese lugar


Los invitados comienzan a inquietarse esperando la función

buscan en su horizonte algo en qué ocupar las manos
pero descubren que la casa está completamente vacía

no existe un lugar donde sentarse

no existe algo que beber o que comer


Alguien anuncia la presentación de una película

los invitados se dirigen hacia algún recinto distinto
del cual ocupan en ese momento

(es posible que ahí estén pasando una  película)

los invitados comienzan a inquietarse esperando la función



algunos rastros indican que ya ha sucedido algo

algunos rostros indican que ya ha sucedido algo



Alguien anuncia la presentación de los músicos

lo cierto es que nadie habla
lo cierto es que a los invitados les gustaría encontrar

un lugar donde sentarse
o un vaso para ocupar las manos


no existe un lugar donde sentarse

no existe algo que beber o que comer


Los invitados comienzan a inquietarse esperando la función

siguen llegando invitados
pero descubren que la casa está completamente vacía

algunos rastros indican que ya ha sucedido algo

algunos rostros indican que ya ha sucedido algo


Cuando observan un sector específico dentro de la casa

descubren que está completamente vacío


pero el espacio inmediatamente contiguo

está repleto de invitados que siguen llegando



Cuando observan un sector específico dentro de la casa



descubren que está completamente vacío






Alicia se multiplica



La multiplicidad de momentos de una cosa
es lo que hace que no transparezca su verdadero ser,
y justifica la pregunta de cuáles son sus principios verdaderos.

Xavier Zubiri




Alicia entra en su habitación
se tiende sobre la cama
y observa la vela sobre la mesa de noche

tras la luz de la vela existe una luz más oscura


Bajo la  habitación
una segunda Alicia entra en su habitación
se tiende sobre la cama
y observa la vela sobre la mesa de noche

tras la luz de la vela existe una luz más oscura


Bajo la cama una tercera Alicia

observa la vela sobre la mesa de noche

tras la luz de la vela existe una luz más oscura



Dios observa la situación seccionada
desde fuera de la casa

observa simultáneamente todas las habitaciones

idénticas una sobre otra


Detrás de Dios
un segundo Dios observa
a través de la transparencia del primero

los ojos de Alicia

sobre la vela sobre la mesa de noche


el segundo Dios
no cree lo que está viendo
y vuelve su mirada hacia un tercer Dios

ubicado tras de él


El tercer Dios observa
a través de la transparencia del segundo y el primero

los ojos de Alicia

sobre la vela sobre la mesa de noche





Una luz se apaga se enciende y se apaga



El artista decide guardar silencio

ha comprobado que las palabras

se desvanecen al ser pronunciadas

tampoco es posible el silencio


El artista decide guardar silencio

y dice luz

y la luz se apaga

(el artista oprime el interruptor)


El artista decide guardar silencio

y dice luz

y la luz se enciende

(el artista vuelve a oprimir el interruptor)


El artista decide guardar silencio

y dice luz

y la luz se apaga

(el artista vuelve a oprimir el interruptor)




En un hospital

Llegué al hospital como se llega desde un edificio a otro sin notar que cuando traspasé la puerta, traspasaba también cierto límite viviente. Primero fue una voz la que parecía presentar los hechos, luego muchas voces superpuestas.

Ahora, mientras avanzo, siento que una mano guía un pequeño cuerpo semejante al mío a través de un pequeño pasillo semejante a este, guiado como en una maqueta, en un simulacro. Todo en miniatura.

1. El diagnóstico, el tratamiento, las pequeñas esperanzas de pequeñas psiquis atrapadas, todo girando

2. Mujer entrando al hospital

3. Un catálogo me habla sobre posibles enfermedades

4. Mujer 2 en la sala de espera

5. Un paciente entra en urgencia

6. Un segundo diagnóstico, un segundo tratamiento, nuevas y pequeñas esperanzas, todo girando

7. Un libro me habla sobre otras vidas

8. Intentan averiguar mi profesión, mi sexo, mi grupo sanguíneo

9. Pequeñas personas conversan sobre pequeñas trivialidades desde afuera

10. Intentan averiguar sobre mi sangre

11. El hospital, el mundo, todo girando

12. Los vivos, los pacientes

13. Transformación del hombre o la mujer en paciente hombre o paciente mujer

14. Cada paciente representa una enfermedad y a sí mismo

15. Al otro lado los muertos o las otras vidas

16. Cuerpos que vagan por el hospital como por un sueño

17. La madre del pequeño paciente cristalizado

18. No es posible lamentarse menos

19. Pequeños puntos de vista

20. Elijo mi color favorito

21. Nuevamente las esperanzas, este horror infinito

0. Llamé a la esfinge
  Esfinge: ¿Aló?
   Yo: Estoy en el hospital, tengo mucho miedo y necesito ayuda
  Esfinge: Concéntrese y elija un número entre el 0 y el 21

Entonces colgué. No había tal esfinge: era la parca blanca

Algo queda dando vueltas en mis pensamientos como en un sueño:
los muebles, los diálogos, los números de teléfono

Yo que estoy enfermo y que cuento esta historia tengo mucho miedo
ahora dudo

El daño es algo que tiene que ver con las antenas ¿con los teléfonos?
ahora dudo

Despierto una y otra vez en diferentes lugares
despierto mientras vivo y sigo viviendo
¿cómo sería si no?
continúo despierto y duermo y despierto y sigo viviendo

¿Somos cabezas?





Ja, ja, ja ¡somos cabezas!

Es una de las imágenes más aterradoras
ver una cabeza que flota en una sala vacía
pensando que está viva
gesticula (susurra y frunce el ceño)
Han pasado muchos años
y la cabeza sigue igual
gesticula (susurra y mueve los globos oculares)

Suspendida sola en una sala
una cabeza enseña una mueca triste

Converso pero en una habitación sola
soy un rostro que gesticula y balbucea

En este caso yo (la psiquis)
soy la más rara y la más antigua

Separada de todos
Maldita de vida
Inhalo el vapor de los cuerpos
y en instantes me convierto en el amor
como en una bacteria pegajosa y sin ojos

Luego soy un cuerpo
del abdomen me crecerán patas
y se me formará una cabeza
justo al centro de todo

Posteado por Angela Barraza Risso el 17:52. etiquetado en: , , , . puedes segui el rss RSS 2.0. déjanos tu comentario

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